Previo a realizar el proceso de marca personal, acompañamos a Olga a un proceso de cambio personal, potenciando habilidades y plasmando su visión a través del Coaching.
Aplicando las técnicas de coaching más eficientes, certificadas por ICF (International Coach Federation), combinadas con actividades creativas, definimos un plan de acción conjunto.
Posteriormente, definimos sus objetivos profesionales: convertirse en referente de técnicas de color, potenciar su comunicación con sus clientas y mejorar su visibilidad en Instagram.
Descubrimos su esencia, para darle un estilo único y diferencial, enfocándonos en su pasión por las melenas y por su cuidado y resaltando lo que mejor hace: simplemente, los mejores babylights y balayage de la ciudad.
En equipo con nuestros colaboradores Gabriela Rovetto (asesora de imagen y Verónica Molina (diseñadora gráfica) definimos una imagen de marca coherente y con mucho estilo.
A través de la estrategia digital y de contenidos, Olga multiplicó su impacto en Instagram, pasando de 600 a 9.000 seguidores y consiguiendo gran engagement.